Bérénice:

Me dió muchísima ilusión tener la posibilidad de volver a visitar Granada después de tantos años.

Finalmente llegó el día y creo que puedo decir que aprovechamos a fondo de nuestro tiempo: el Albayzín, el Realejo, el Campo del Príncipe, la Alhambra, teterías, tapas, migas, tinto der verano y cervecitas con amigos - lo hemos hecho todo.

Ha sido tan importante enseñar estas cosas como parte anterior de mi vida a mi familia, como ha sido importante ver a mis amigos que conocí en Granada para ver que siguen siendo parte de mi vida.

Pasamos dos tardes con Santi y sus hijos que tienen 8 y 5 años. Los niños se acercaron a nosotros y sobre todo a Yilian sin timidez pero con un sincero interés de comunicar con él. Jugaron con él aunque esté mucho más joven que ellos. Se ve que su papá es el mejor del mundo para ellos, con su humor, sensibilidad, inteligencia y un poco de estrictez apropiada.

Ángel vino todo el Camino de(sde) Ronda (vaya juego de palabras) después de la victoria del Real Madrid para un desayuno y un paseo turístico por la Alhambra. Escuchándolo hablar me acordé de sus entusiasmo, su acento que padece completamente del uso de la ’s' y que cuenta con una rapidez incomparable. (¡Imagina que aprendí mucho hablando con él!) Ahora sé también que él tiene su entusiasmo de su madre - pude hablar un rato con ella por teléfono paseando por el Palacio de Carlos V.

En fin - ha sido un placer, caballeros. Ahora, os toca a vosotros: ¿Cuándo os veo en Alemania?